¿EL ACEITE CADUCA? CÓMO SABER SI TU LUBRICANTE ESTÁ EN MAL ESTADO

El aceite del motor es uno de los elementos más esenciales para el buen funcionamiento de cualquier vehículo. Lubrica las piezas internas, reduce la fricción, evita el desgaste y ayuda a mantener el motor limpio y en buenas condiciones.

El aceite del motor es uno de los elementos más esenciales para el buen funcionamiento de cualquier vehículo. Lubrica las piezas internas, reduce la fricción, evita el desgaste y ayuda a mantener el motor limpio y en buenas condiciones. Pero una pregunta que muchos conductores se hacen es: ¿el aceite caduca? Y si es así, ¿cómo podemos saber si ya no está en condiciones óptimas?

En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la caducidad del aceite lubricante, cómo identificar un aceite en mal estado y qué hacer si tienes dudas sobre el aceite que utilizas. Además, te mostramos las mejores opciones de lubricantes disponibles en azoil.es, para que siempre tengas a punto tu vehículo.

¿El aceite de motor caduca?

La respuesta es sí, el aceite de motor puede caducar, aunque no en el mismo sentido que un alimento o un medicamento. Con el tiempo, tanto el aceite nuevo (sin usar) como el que ya está en el motor pueden perder sus propiedades químicas y físicas, volviéndose menos eficaces para proteger y lubricar el motor.

Los aceites lubricantes contienen una base (mineral, sintética o semisintética) y un conjunto de aditivos que cumplen diversas funciones: detergencia, dispersión de residuos, antioxidación, anticorrosión, etc. Con el paso del tiempo, estos aditivos pueden degradarse o separarse de la base, especialmente si el envase no ha estado en condiciones óptimas de conservación.

¿Cuál es la vida útil del aceite?

La duración del aceite depende de si está almacenado sin usar o ya ha sido introducido en el motor.

1. Aceite almacenado (sin abrir)

En general, los fabricantes indican que un aceite nuevo puede durar entre 3 y 5 años si está en su envase original, cerrado y bien conservado. Esto puede variar según la calidad del aceite y las condiciones de almacenamiento (temperatura, humedad, exposición a la luz).

Es importante comprobar la fecha de fabricación en la etiqueta del envase o en el lote. Si han pasado más de 5 años, es mejor no utilizarlo en motores modernos, aunque algunos aceites pueden mantener sus propiedades más tiempo si han sido almacenados en condiciones ideales.

2. Aceite en uso (en el motor)

Una vez que el aceite se introduce en el motor, su degradación empieza de inmediato, incluso si no usas el vehículo con frecuencia. El contacto con el oxígeno, los residuos de la combustión y la humedad del entorno aceleran su deterioro.

Por eso, los fabricantes recomiendan cambiar el aceite cada:

• 10.000 a 30.000 km, dependiendo del tipo de aceite y el vehículo.
  
  

• Una vez al año, aunque el coche apenas se use.
  
  

Cómo saber si tu lubricante está en mal estado

Aunque no todos los signos son visibles a simple vista, hay algunas señales que indican que tu aceite ya no cumple su función correctamente:

1. Color muy oscuro o negro

El aceite va oscureciendo con el uso, pero si el color es muy negro y opaco, puede significar que contiene demasiados residuos, hollín o contaminantes.

2. Olor fuerte o a quemado

Si el aceite huele a quemado, es una señal clara de sobrecalentamiento o deterioro químico, lo que puede provocar daños al motor si no se cambia cuanto antes.

3. Textura espesa o con grumos

El aceite debe ser fluido y homogéneo. Si al tocarlo notas una textura viscosa, grumosa o con partículas, está contaminado o degradado.

4. Presencia de espuma o burbujas

Puede indicar contaminación por agua o aire, lo que reduce su capacidad de lubricación.

5. Pérdida de rendimiento del motor

Si notas que el motor hace más ruido, se calienta más de lo normal o el coche consume más combustible, podría deberse a que el aceite no está cumpliendo su función correctamente.

¿Qué factores aceleran la caducidad del aceite?

Existen varias condiciones que pueden hacer que el aceite se degrade antes de tiempo:

• Temperaturas extremas (especialmente el calor).
  
  

• Contaminación por humedad, agua o suciedad.
  
  

• Mal almacenamiento (envases abiertos, mal cerrados, expuestos al sol o a fuentes de calor).
  
  

• Combustión incompleta o uso urbano excesivo, que genera más residuos y acelera la oxidación.
  
  

• Aceites de baja calidad o sin aditivos adecuados.
  
  

¿Qué hacer si tienes dudas sobre tu aceite?

Si no estás seguro de si el aceite que tienes en el garaje todavía sirve, o si ya han pasado varios años desde su compra, lo mejor es reemplazarlo por uno nuevo.

En azoil.es encontrarás una amplia selección de lubricantes de alta calidad para todo tipo de vehículos, tanto de motor gasolina como diésel, incluyendo opciones sintéticas, semisintéticas y minerales de marcas reconocidas.

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Consejos para conservar bien el aceite

Si compras aceite a granel o guardas envases sin usar, sigue estas recomendaciones para alargar su vida útil:

• Guarda los envases en lugares frescos, secos y oscuros.
  
  

• No los expongas a la luz solar directa ni a fuentes de calor.
  
  

• Asegúrate de que estén bien cerrados y en posición vertical.
  
  

• Evita cambios bruscos de temperatura.
  
  

• Etiqueta los envases con la fecha de compra o apertura.
  
  

¿Y si el aceite ya está en el motor? ¿Cómo saber cuándo cambiarlo?

Además de seguir las recomendaciones del fabricante, puedes hacer un seguimiento del estado del aceite con:

• Varilla de medición: muchas veces podrás ver el color y textura.
  
  

• Test de aceite: existen kits que permiten comprobar la calidad del aceite.
  
  

• Revisiones periódicas: en cada mantenimiento del vehículo, el taller puede verificar si es necesario el cambio.
  
  

Sí, el aceite caduca. Aunque no lo parezca, con el tiempo y el uso pierde sus propiedades y deja de proteger el motor como debería. Tanto si tienes aceite almacenado como si hace tiempo que no haces el cambio, es fundamental revisar su estado para evitar averías y prolongar la vida útil del vehículo.

Si detectas que tu lubricante huele mal, ha cambiado de color o textura, o simplemente no estás seguro de su antigüedad, lo más recomendable es sustituirlo cuanto antes.

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